Sábado a la noche

Cada fin de semana que me quedo en casa (lo cual ocurre bastante seguido), mi mamá me dice "así no vas a conseguir novio", y yo insisto en que saliendo a bailar, tampoco.

El sábado una amiga festejó el cumpleaños en un boliche. Sabía que no me iba a divertir tanto porque la mayoría de nuestros amigos en común no iban a estar, pero sí iban a estar sus amigos de la facultad, así que pensé que al menos podía conocer gente.

Cuando empezaron a llegar los amigos de mi amiga yo no lo podía creer, ¡uno más lindo que otro! Y muy simpáticos también. Me entusiasmé pensando que algo bueno podía pasar esa noche.

Lo triste comenzó a la hora de bailar. Estos muchachos ya habían bebido bastante, y se reían como tontos y gritaban. Y bailaban entre ellos. No sólo que no sacaron a bailar a ninguna chica, sino que hasta bailaban entre sí, y de la mano!! Me quería morir. Pero por algo mi amiga no está de novia con ninguno de ellos, debí haberme imaginado que esa noche no iba a conocer al amor de mi vida.

En un momento me senté a un costado para descansar (de bailar sola como una idiota) y para observar la situación: qué patético ritual se repite fin de semana tras fin de semana en miles de lugares similares a lo largo del país. Mujeres que pasan horas eligiendo qué ponerse, arreglándose el pelo, maquillándose... para estar otras tantas horas en vidriera, haciendo pasos de baile sexy esperando que algún pavote la mire. Y los hombres, con el infaltable trago en la mano, saltando como monigotes, en el mejor de los casos acercándose con algún chamullo barato, si no es que directamente pasan toda la noche junto a sus amigos.

Vuelvo a casa cansada, embolada, y sola como siempre. Sé que el hombre que busco no está en esos lugares, porque prefiere, al igual que yo, quedarse en su casa leyendo o viendo una película antes que formar parte de esa ridiculez sin sentido. Pero él en su casa y yo en la mía, ¿cómo nos vamos a encontrar?