jueves, 31 de julio de 2008

La peor cita de mi vida

Leyendo hoy el blog de Vanina, recordé el pedido que alguna vez Elemental hizo en su blog, de escribir la peor cita de tu vida. Cuando llegué el "concurso" ya había terminado, y me quedé con ganas de relatar la mía.

M. y yo éramos compañeros de trabajo, pero casi no teníamos contacto. No me gustaba y no me caía bien, y las pocas veces que hablábamos discutíamos por algo. Pero después de unos seis o siete meses algo en él me llamó la atención, y dejó de parecerme desagradable.

Yo venía de tres años de una relación enfermiza con un tipo casado. A fines de diciembre decidí cortar de una vez con eso que me hacía tanto mal y me sentí feliz como nunca. Estaba sola pero muy bien conmigo.

En esa época empecé a hablar un poco más con M. Él también estaba saliendo de una relación de tres años con una mujer con la que no se llevaba nada bien. Ella había vuelto a la casa de sus padres y de a poco se iba acabando todo.

A fines de enero, ambos libres, comenzó nuestro coqueteo en una fiesta. Un mes después, nuestro primer beso en el cumpleaños de un amigo en común. Un café en un bar después del trabajo, una salida al cine, una caminata por la ciudad hasta el amanecer... Todo era perfecto. Ambos sentíamos que habíamos encontrado a LA persona, quien nos iba a hacer felices después de tantos años de relaciones fallidas.

Creo que fue a la cuarta "salida formal". Viernes a la salida del trabajo, vamos a tomar algo a un bar que nos gustaba mucho. La conversación muy tranqui porque los dos somos de hablar poco. Sin embargo, lo notaba ajeno, la mirada perdida. "¿Te pasa algo?", le pregunté. Y ahí empezó:

M.: - Hace unos días, mi ex, está dando vueltas...
Mi cabeza: - (Cagamos, la mina quiere volver)
M.: - Y yo con esa mina no quiero saber nada, no la quiero ver más
Mi cabeza: - (Uff, menos mal, qué alivio)
M.: - Y hace rato que viene jodiendo con que está embarazada, es algo que hace siempre... obviamente nunca le creí, pero ahora insistía...
Mi cabeza: - (...)
M.: - Así que le dije 'vení al departamento así te hacés el Evatest y listo', y bueno, el martes fue, la puse ahí que se hiciera el test...
Mi cabeza: - (Que le haya dado negativo, que le haya dado negativo, que le haya dado negativo...)
M.: - ...y le dio positivo.

Yo me sentía en una telenovela. No sabía cómo reaccionar porque no podía creer que una cosa así me estuviera sucediendo. Es más, a medida que lo iba viviendo me imaginaba contándoselo a alguien, o escribiéndolo, porque era muy de película.

Cuando recuperé el habla, le pregunté cómo iba a afectar nuestra relación este hecho. Él me dijo que no sabía, que tenía miedo de que yo lo rechazara, y que si yo quería seguir con él , él quería seguir conmigo. Yo, enceguecida como estaba, le dije que sí, que para mí no era un problema, y le prometí no contarle a nadie, ni siquiera a mi familia, tal como me lo había pedido.

La peor cita de mi vida continuó sin mayores sobresaltos, yo aproveché y le conté un par de cosas mías que nadie sabe (por ejemplo, lo del tipo casado) y la noche terminó normalmente como si nada loco hubiera sucedido.

Si en el momento en que me contó que iba a tener un hijo (una hija, para ser más exacta, que justamente hoy cumple 9 meses) yo lo hubiera mandado donde correspondía, me hubiera ahorrado:
-la segunda peor cita de mi vida, un mes después de ésta, en la que me dijo que no podía seguir conmigo (aunque un mes después volvió).
-horas de espera frente al monitor esperando su saludo por chat.
-la bronca que me comí un sábado por la mañana cuando lo llamé, atendió pero no habló y cortó; las 30 llamadas posteriores sin respuesta; su llamado a la siesta mintiéndome que recién se despertaba; su posterior confesión de que en realidad había estado con la ex comprando una cuna.
-muchas noches esperando un mensaje o llamado que nunca llegaron cuando estaba de viaje por trabajo.
-un par fines de semana en cama y llorando porque lo nuestro venía cada vez más en picada.
-el hecho que su familia no supiera de mi existencia.
-esto

La lista sigue. Soporté tanto porque, hasta el día de hoy, creo que es mi alma gemela, y yo la suya. Tendría material para varios posts si tuviera que describir cómo se fue desbarrancando la "relación", cómo me sentí el día que nació la hija, cómo conviví varios meses con una tristeza infinita.

Hoy, prácticamente M. está fuera de mi vida. Quiere verme, porque tenemos una conversación pendiente, ya que nuestra historia se fue diluyendo pero nunca dejamos en claro cómo seguirían las cosas. Esperé mucho, mucho tiempo esa charla. Mil veces pensé, y llegué a escribir, lo que pensaba decirle. Pero "el tiempo y la distancia matan al amor", me dijo un psiquiatra, y tenía razón. Ya nada tiene sentido. Ya no necesito decirle todo eso que tenía guardado para sentirme bien. Ya no me importa si todavía piensa en mí, y ya no es él en quien pienso antes de dormir.

Y tengo miedo de pisar el palito si lo vuelvo a ver. No quiero vivir otra vez una relación que me haga sufrir. Quiero que la próxima sea la mejor cita de mi vida.

martes, 29 de julio de 2008

Como una adolescente

Así me siento cuando el rubio que no me gusta físicamente pero que escribe sin errores de ortografía me llama por teléfono o pasa por mi oficina. Se me acelera el corazón y se me estruja el estómago, y a la noche me acuesto imaginando situaciones que podrían darse entre nosotros.

Soy una enferma. O tal vez estoy muy necesitada de amor.

viernes, 25 de julio de 2008

¿A quién me parezco?


  • A los 15 años me levanté una mañana, despeinada, con calor, y cuando me miré en el espejo del baño me vi parecida a Anna Chlumsky (la chica de "Mi primer beso"). Unos días después una compañera de curso también encontró el parecido.

% de coincidencia: los ojos claros, la nariz ancha, los labios gruesos.

Qué opino: cuando era chica sí me parecía.



  • Cuando estaba en 6º año, una mocosita de 1º me dijo la hermana de Darín y Viviana Saccone.

% de coincidencia: cero.

Qué opino: Horror! De los dos hermanos no se sabe cuál es más feo (supongo que ella, porque es mujer). Como sea, no quiero tener nada que ver con esa familia.


% de coincidencia: poco y nada. La cara delgada puede ser.

Qué opino: nada.



  • En mi primer trabajo, una gorda loca a quien hubiera querido asesinar por su comentario me dijo Dolores Trull.


% de coincidencia: soy flaca (no tanto) y tengo la cara alargada (no tanto).

Qué opino: esta mina es horrible!!!



  • Apenas conocí a mi amiga Nati, me dijo Paloma Herrera.

% de coincidencia: bastante. La forma de la cara, el pelo, el carácter, el ballet (¿?¿?¿?)

Qué opino: esta mina es la mejor bailarina que existe. Ya que no bailo ni el 0,1 % de lo que baila ella, me encanta parecerme aunque sea físicamente. Creo que desde ese día me hice amiga de Nati.


  • Una amiga hace dos años, y una compañera de coro hace dos meses, dijeron Romina Gaetani.
% de parecido: los ojos claros, la forma de la cara, la nariz grande, la sonrisa fea.

Qué opino: cuando vi a esta mina por primera vez dije "cómo pueden decir que esta mina es linda, si hasta se parece a mí"


  • La del coro que me dijo Gaetani, remontó varios puntos cuando también me dijo Sandra Bullock.
% de parecido: creo que nada.


Qué opino: me identifico con todos los personajes de Sandra Bullock. Siempre dije que si se filmara la historia de mi vida (aparte de que nadie iría a ver esa película) mi personaje lo haría ella.


  • Una compañera de trabajo este año me dijo "Jane Eyre" (la de Charlotte Gainsbourg).




% de parecido: la forma de la cara, la forma de ser (de Jane, la de la actriz la desconozco)

Qué opino: me hubiera encantado vivir en Inglaterra en esa época (que no sé cuál es) y ser institutriz. Me encanta Jane Eyre.


  • Finalmente, un sitio que te dice a qué famoso te parecés, entre otros que no recuerdo, salió Liv Tyler.



    % de parecido: pelo oscuro, ojos claros, cara alargada.

    Qué opino: lo malo de ser Liv Tyler es que Steven Tyler sería mi papá, y a mí el viejo ese me encanta.


    Si esperaban ver mi foto no la van a encontrar. Hagan un rejunte mental de todas las imágenes anteriores (menos la de Darín) y ahí apareceré.

Love is blind (and deaf and dumb*)

El amor no sólo es ciego, sino que también deja que te tomen por estúpida.

Viernes a la noche, festejo de mi cumpleaños. Uno de los mejores cumpleaños que he tenido. Estuvieron todos, nos divertimos un montón. Con M. nos quedamos en el boliche hasta las 5 de la mañana, después de haber pasado una noche espectacular.

Se fue en su moto. Estaba muy cansado porque venía de varios días de trabajar mucho, y en la fiesta había bailado bastante y tomado tanto más. Me quedé preocupada, rogando por que no le pasara nada. Un rato más tarde lo llamé para ver si había llegado bien. No me atendía. Probé un par de veces más pero el teléfono estaba apagado. Le mandé un mensaje: "solo quería saber si habías llegado bien. Que descanses".

Al día siguiente no tuve noticias.

El domingo a la noche decidí llamarlo. No me atendió, pero al rato llamó él: (como si nada) "acá estoy, en XXXX (ciudad natal de él)" "Pasó algo??!!", me preocupé yo, ya que su abuela no estaba bien de salud, "No, nada, ayer mi tío se venía para acá y me preguntó si quería venir".

El lunes cuando nos vimos me dijo "ah, y después de tu cumple, cuando me llamaste, ya estaba acostado, y como no tenía los anteojos pensé que sonaba el despertador y por eso apagué el teléfono, y cuando el sábado vi tu mensaje dije pobre Sil, no la atendí".

Yo no dije nada, sólo sonreí. Casi un año después me doy cuenta de lo imbécil que fui. ¿Cómo no lo insulté de arriba a abajo? No me atiende cuando lo llamo, al día siguiente ve mi mensaje y tampoco me llama, se va de viaje a otra provincia y no me avisa, pasa un día más y cuando lo llamo no me atiende porque no quiere que su mami sepa que está saliendo conmigo.

Esta es una de las tantas cosas que le perdoné a M. Y al que tenía antes que él, le perdoné muchas más cosas, más graves aún. ¿Algún día dejaré de ser tan buena?

*DUMB (by Merriam-Webster)
1 mudo
2 estúpido, tonto, bobo

miércoles, 23 de julio de 2008

¿Dónde estás, kernel de mi linux, que no te puedo encontrar?

Trabajé cuatro años en el rubro informática.
El 90 % de mis amigos son ingenieros/licenciados/analistas/estudiantes de Sistemas.
Paso cerca de 10 horas al día frente a una computadora.
Tengo cuenta de Gmail, de Hotmail y dos de Yahoo (sin contar la del trabajo, y una de Starmedia que no uso nunca).
Chateo por Gtalk y por MSN (y en mi trabajo anterior también por Yahoo y AOL).
Estoy en Facebook y en LinkedIn.
Participo en foros.
Tengo un blog y leo muchos más.
Mis fotos están en Picasa.
Me registré en SecondLife (aunque nunca participé).
Pago mis cuentas a través de Internet.
No escucho música que no salga de una PC.
Mi agenda es el Outlook.
Estoy cursando una carrera online.
El año pasado empecé a estudiar algo de programación.
En los últimos años he leido más libros virtuales que en papel. Diarios también.
Ya no estudio las partituras de mi coro; escucho otras versiones en YouTube (donde también estoy registrada).

Viviendo una vida tan absorbida por la tecnología, no es raro que lo único que extrañe de mi ex (oh casualidad, futuro Ing. en Sistemas) sea su ventanita siempre busy del Gtalk, con el hombrecito de vitruvio naranja que todas las mañanas me saludaba "hola bb".

viernes, 18 de julio de 2008

You've been pranked

Tratando de evitar por todos los medios una llamada que tengo que hacer a EE.UU., recordé algo que me pasó hace unos 5 años en mi primer trabajo. En ese momento pasó como una anécdota más pero ahora - sí, recién ahora, ayer, anteayer - me doy cuenta de que me tomaron el pelo.

Yo era telefonista, y debía comunicar a la responsable de Compras con un representante de ventas de una empresa del mencionado país. Como ella no hablaba inglés, debía contactar a alguien que hablara español.

Luego del saludo del rigor al tipo que me atendió, mi pregunta fue más o menos May I speak to a sales representative that speaks Spanish? No me entendió. Vamos de nuevo. I need to talk to somebody who speaks Spanish. Seguía sin entender (supuestamente). "Stani?" "Sandwich?" "Johnny?" Le repetí la pregunta varias veces de distinta manera. Nada. Incluso le deletreé S-P-A-N-I-S-H. Después de no sé cuántos minutos me dice "That would be some kind of language?" Yes! Finalmente me dijo que la persona con quien podría hablar no estaba, pero me pasó los datos para que le enviara un mail. El nombre era "José Speedy". Me pareció un poco raro ese apellido, pero ahí quedó, y nunca supe si del área de Compras intentaron comunicarse con ese supuesto José.

El hecho es que si el tipo supiera que recién ahora caigo que me estaba haciendo una joda, se reiría más de lo que lo hizo en aquel momento.

jueves, 17 de julio de 2008

Calificación: 1 (uno)

Texto tomado de un post en un foro:

..no c ke aser si desirselo o mantenerlo si se lo digo estoy tan seguro...ke mi familia se ara pedasos en el mismo problema...y abeses me da tanta rabia ke estoy a punto de ir a akabar kon el tipo ese...el unico problema eske el maldito ese es papa de unos de mis mejores amigos y no soy kapas de aserle la bida pedasos a uno ...ago como si no supiera nada ...los conosco desde ke tenia 5 años asta mis 17 años...si ago algo ... no c como aserlo o ah kien apoyar mi vida se bendria abajo...tendria musho mas enemigos y mas rasones...me siento debastado..no c ke aser estoy desesperado ...

Le corté algunas partes porque los errores se repetían y porque ya me dolía la mano de tanto hacer click en el color rojo.

No entiendo cómo alguien que escribe así pudo pasar primer grado. Yo creo que las maestras se cansan de aguantar burros y por eso los van haciendo pasar para que al año siguiente se haga cargo otra.

Y no le puse 0 (cero) porque por como venía escribiendo ya me veía venir "apollar" o "decesperado".

martes, 8 de julio de 2008

¿Lo digo o no lo digo?

- Una compañera de trabajo teje bufandas y las vende. Me probé unas cuantas pero no eran nada extraordinario, además casi no uso bufandas, pero le iba a comprar una para quedar bien. Cuando me dijo el precio me pareció demasiado, así que le dije que no, que lo lamentaba pero que eran muy caras. ¿Soy una desubicada? Si le decía que no se las compraba porque no me gustaban también iba a quedar mal (además ya le había dicho que sí me gustaban).

-¿Qué se le dice a una chica de 20 años, soltera, que no quería tener hijos, pero que quedó embarazada y que no está muy contenta? Pienso que si la felicitás es como si te le estuvieras cagando de risa.

Necesito un Manual de Urbanidad urgente.

lunes, 7 de julio de 2008

Playing truant

Nunca entendí el sentido de "hacerse la chupina" ("la rata" o "la rabona" en otras ciudades de Argentina, "hacer novillos" en España): hacer como que vas al colegio pero no ir para quedarse dando vueltas por ahí.

O sea, te levantás a las 6.30 de la mañana (yo entraba a las 7.20, ¡ay!), te ponés ese uniforme horrible, te llevás la mochila a cuestas, ¿y te vas a otro lado? ¿No sería más cómodo pedirle permiso a tu mamá para que una vez cada tanto te deje faltar al colegio, así te podés quedar en cama calentito hasta las 11, y después si querés salir a pasear? O aunque sea fingir un dolor de panza, para tener una excusa mejor que "no tengo ganas de ir hoy".

Digo que no le encuentro sentido por la simple razón de que, para mí, lo malo de ir al colegio no era el colegio en sí (que hasta me gustaba), sino el levantarme temprano. Además, si hubiera querido hacerlo, no habría podido: mi papá me llevaba en auto todos los días hasta la puerta. No tenía cómo escaparme. Y tampoco habría tenido compañía para vagabundear: mis compañeras también adoraban ir al colegio.

A los 15 años intenté participar de una "chupina colectiva". Casi al lado del instituto donde estudiaba inglés inauguraron un shopping (Patio Olmos para los que lo conocen). Mis compañeros pensaron que era buena idea faltar a clases para ir a conocer y tomar algo. No muy convencida, acepté ir con ellos. Dimos una vuelta y nos sentamos en el patio de comidas. Pero a mí me agarró el cargo de conciencia pensando en la pobre teacher sola en el aula, así que me fui, prometiéndoles a los demás que no iba a decir nada.

Salí del shopping y vi a la profe en la puerta del instituto. Cuando estaba mirando hacia su izquierda crucé rápido la calle para despistar, y cuando giró hacia su derecha me vio venir caminando desde la vereda del frente. Con mi cara más inocente pregunté qué había pasado, y me contestó que estaba preocupada porque no había llegado nadie. En fin, me dio clase a mí sola, y a la semana siguiente dijo que se había sentido mal pero que ponía las manos en el fuego por todos sus alumnos, que estaba segura de que no habían hecho nada raro. En ese momento nos dio pena, pero ahora que lo pienso creo que lo dijo a propósito para hacerlos sentir mal.

Unos meses más tarde, llegamos y nos enteramos de que ese día tendríamos suplente, así que nos quedamos en la vereda deliberando qué hacer. Cada vez nos alejábamos un pasito del instituto y nos acercábamos un pasito al shopping. En eso sale la suplente, y nos hacíamos los tontos mirando para otro lado, hasta que nos empezó a llamar "chicos, chicos, entren!", tras lo cual empezamos a correr (imagínense, teníamos entre 13 y 16 años, éramos grandes para hacer eso). Yo y dos más decidimos volver, y le dijimos a la vieja que en realidad nosotros habíamos corrido para tratar de atrapar a los que se estaban escapando (repito, éramos grandes ya).

Ya en la universidad tuve más libertad para no ir si no quería, pero cada vez que faltaba a una clase me quedaba mal, pensando que debería haber ido, sin disfrutar del placer que es quedarse un día en casa.